El empleo en Argentina: La desocupación baja a fuerza de rebote y monotributo

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) mostrará este martes que la reapertura de actividades y el rebote de la economía tuvo impacto en el empleo. El ministro de Economía, Martín Guzmán, celebró por anticipado, el domingo en Radio 10, "una contundente recuperación" y "fuerte reducción del desempleo". Los especialistas también auguran que el regreso a la actividad laboral de la población que peor la pasó durante los cierres pandémicos se notará en los indicadores correspondientes al tercer trimestre, que tendrán un doble piso sobre el que rebotar: la comparación interanual y la variación contra abril - junio, los peores meses de la segunda ola de covid-19 y sus correspondientes restricciones.

La inflación y el duro impacto en los trabajadores informales

En ese contexto, el Indec mostrará mejoras en la tasa de actividad (45,9% en el segundo trimestre), en la tasa de empleo (41,5%) y una reducción del desempleo (desde el 9,6% y el pico del 13,1% de un año antes, en pleno aislamiento preventivo). Con todo, la celebración que anticipó Guzmán -advierten referentes empresarios y de los gremios- está lejos de consolidarse.

Los datos que regularmente entrega el Ministerio de Trabajo sobre el empleo registrado anticipan ese panorama gris. Es cierto que, como celebra la cartera de Claudio Moroni, el empleo asalariado privado se recupera mes a mes. Sin embargo, aunque la economía rebotó con más fuerza de la esperada, "se recuperó el 75% de los puestos de trabajo asalariados del sector privado perdidos durante los primeros meses de pandemia (141.000 de un total de 188.000 empleos)", indicó la dependencia oficial en un reporte.

Otra comparación muestra que el empleo registrado volvió al nivel prepandemia, aunque con una caída en el trabajo asalariado privado y un crecimiento en los aportantes al monotributo y los trabajadores del sector público. Entre febrero de 2020 y septiembre de 2021, el monotributo creció 7%, el monotributo social un 9,8% y el empleo público, 3%. El trabajo privado en relación de dependencia se encuentra 0,8% por debajo del nivel prepandemia. El coordinador del Observatorio de Derecho Social de la CTA Autónoma, Luis Campos, analizó: "Desde ya que en comparación con 2020 todo va a crecer, pero si la comparación se hace con 2019, el empleo registrado en el sector privado sigue abajo (ya con los datos del tercer trimestre), mientras que lo que creció fuerte fueron los monotributistas y el empleo público". Y agregó: "El desafío ahora pasa por ver si ese crecimiento económico se traduce en un aumento del empleo registrado o si, por el contrario, quienes siguen traccionando la ocupación son los cuentapropistas".

El Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI) del Ministerio de Desarrollo Productivo permite anticipar esa mejora en la tasa de actividad. Las estadísticas de movilidad de Google muestran que, en el tercer trimestre del año, alcanzó niveles similares a los de la prepandemia. Un indicio de que el empleo informal y en casas particulares, los más castigados durante el aislamiento, tendrían una fuerte recuperación.

Según los datos del Indec, en el segundo trimestre se verificaba que la recuperación del empleo era más lenta entre las mujeres que con los varones. La tasa de empleo de las mujeres había subido 8 puntos porcentuales desde el cerrado segundo trimestre de 2020, mientras que la de los hombres rebotó más de 12 puntos en un año. La tasa de desempleo en mujeres caía tres puntos, del 13,5% al 10,4%, pero la tasa de actividad (la población que tiene trabajo o lo busca) crecía más entre los varones. Quizás porque más mujeres todavía se encontraban sin poder regresar al mercado laboral.

Un repunte en el sector industrial -tenue, según la UIA- y la fuerte recuperación de la construcción (crecimiento del 8,3% trimestral entre julio y septiembre, según Trabajo) no compensan las caídas en los sectores de servicios más afectados, como comercio, hotelería y gastronomía. "En el empleo industrial, se advierte una recuperación de carácter moderado", indicó la Unión Industrial Argentina en un comunicado de la semana pasada. Según el Centro de Estudios de la UIA, la industria creó 30.000 empleos entre marzo de 2020 y septiembre último. En septiembre hubo un salto de 3600 empleos contra agosto, pero en los meses previos, el "goteo" era de unos 1000 trabajos mensuales. La UIA remarca siempre que la industria destruyó 150.000 empleos desde el pico de 2013.

En el sector industrial son cautos para lo que viene. Paolo Rocca, el mandamás de Techint, supeditó la creación de empleo al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que, consideró, ayudará a estabilizar la macroeconomía. "El tema de tomar coraje para hacer inversiones en capital humano, creo que es momento para considerarlo una vez que se encamine la dinámica de largo plazo, porque es muy difícil saber cuáles son los términos en los que Argentina va a estar en los próximos cuatro meses", dijo. "Es inevitable que la pyme, aun con una visión positiva, sea cauta en esta circunstancia en los próximos meses", sostuvo.

Fuente: Letra P

Para Campos, en cambio, "2022 no anticipa ser un buen año, haya o no acuerdo con el FMI". "Para adelante, tenemos los mismos problemas irresueltos de fines de 2019, agravados, y eso que la situación de entonces ya era muy complicada".