Caso Vicentin: AFIP se suma a la causa y prepara una denuncia por fuga de capitales y sobrefacturación

El Gobierno parece haber redoblado la presión sobre Vicentin si se tiene en cuenta que a las sospechas de las actuales autoridades del Banco Nación sobre un préstamo otorgado por la anterior gestión de la entidad oficial, ahora se suma la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) con una posible investigación sobre supuestos delitos tributarios que habría cometido la empresa.

El organismo fiscal que comanda Mercedes Marcó del Pont estaría recabando datos y pruebas que le permitan impulsar una denuncia penal contra el presidente de Vicentin y el resto del directorio.

Con ese objetivo, los equipos técnicos de la AFIP intentan recopilar antecedentes sobre la posible comisión de delitos vinculados con fuga de capitales, elusión fiscal y sobrefacturación de datos.

De llegar a recabar los datos necesarios, la orden de Marcó del Pont habría sido la de presentar la documentación ante la justicia para solicitar la apertura de una causa penal contra los actuales ejecutivos de la compañía de agronegocios.

También se abrirían otras dos causas paralelas. Una contra Javier González Fraga, el ex presidente del Banco Nación, por incumplimiento de los deberes de funcionario público. Se lo acusa de haber facilitado el otorgamiento de un millonario préstamo por $18.000 millones que Vicentin nunca devolvió y que la nueva gestión del Nación asegura que se trata de una maniobra delictiva. De hecho, la entidad bancaria oficial también estaría impulsando una denuncia similar contra González Fraga.

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En cuanto a las otras demandas que se prepararían en el seno de la AFIP se orientarían a que se investigue si hubo responsabilidad de algunos ex funcionarios de la Aduana en complicidad con la compañía para permitir los supuestos delitos fiscales. En este caso, se habría abierto un sumario administrativo para analizar el caso.

Estas determinaciones tomadas por la AFIP y las denuncias impulsadas desde el Banco Nación se suman a las declaraciones del presidente, Alberto Fernández, quien no descartó la estatización de la compañía.

Lo hizo durante un reportaje otorgado al canal de noticias C5N, en el cual calificó como "muy grave" la crisis desatada por el default de Vicentín y aseguró que trabaja con el directorio del Nación para analizar posibles soluciones ya que "nadie quiere que la fuente de trabajo se cierre".

En una entrevista con el programa "Hagan algo", subrayó que hubo, como mínimo, una "irresponsabilidad enorme" de la conducción empresaria y de las anteriores autoridades del Nación vinculadas al millonario crédito.

Esos fondos quedaron atrapados en el default declarado por la firma, luego de que en diciembre suspendió pagos por u$s1.000 millones a acreedores comerciales y financieros argumentando sufrir "estrés financiero".

Esa maniobra dejó un tendal de incumplimientos en la cadena agrocomercial y su impacto ya se siente en la economía de la región pampeana. De hecho, se especula que algunos sectores del Gobierno impulsan la idea de estatizar Vicentin aprovechando que el Nación es el principal acreedor financiero local de la agroexportadora y, de acuerdo a las estimaciones oficiales, la exposición en la que quedó por el default afecta fuertemente el patrimonio de la casa crediticia.

Al respecto, hace unos días, Claudio Lozano, uno de los nuevos integrantes del Directorio del Nación,
difundió un lapidario informe sobre los préstamos otorgados a Vicentín y calificó la operación de "una maniobra fraudulenta". Además, advirtió que "ninguno de los números disponibles justifica la repentina crisis financiera" de la empresa.

En la actualidad, la empresa es el sexto mayor exportador de cereales, oleaginosas y sus derivados con una participación del 9% del mercado y el despacho de unos 300 barcos al año entre granos, harinas y aceites.

Para intentar recomponer su situación y evitar la presión del Gobierno, la empresa ya presentó un plan de pagos a sus acreedores comerciales, a partir de un Acuerdo Preventivo Extrajudicial (APE).

Según medios provinciales, la oferta incluye el pago del 20% al contado, con un fijo de u$s30 millones y la cancelación del resto del pasivo en ocho años, que pueden ser seis para los que acceden a seguir vendiendo grano a la compañía, para lo cual ofrecen además un plus de precio por tonelada.

De acuerdo a lo informado por el portal Agrofy, un grupo de 150 damnificados reunidos en el colectivo "Sumando Cabezas", presentaron reparos. "No encontré ningún miembro que diga que le haya parecido buena la propuesta", consignó Nicolás Galli, designado como vocero del grupo, a ese sitio informativo.

En cuanto a las acusaciones por el préstamo del Nación, la empresa emitió un comunicado en el que califica de "ofensivas" las denuncias y asegura que se trata de "maniobras que manipulan datos de la realidad para construir un relato totalmente falso".

En ese contexto, su directorio aclara que la crisis financiera que atraviesa Vicentin es consecuencia de una serie de factores que enumera en el mismo documento.

En primer lugar, explican que durante los últimos 20 años la compañía "invirtió fuertemente en plantas de biodiesel a partir de aceite de soja, etanol a partir de maíz, ampliaciones de capacidad de molienda de oleaginosas, puertos, contrayendo para ello endeudamiento de distintas instituciones, en su mayoría Internacionales".

También se responsabiliza de los problemas a la situación económica nacional, que comenzó a deteriorarse a partir de la crisis financiera del 2018, "con algunas empresas argentinas realizando planteos de refinanciación a sus acreedores, agravada con la incertidumbre política del 2019, imposibilitó la renovación de líneas de crédito".

Agregan que en el segundo semestre del 2019 el retiro de los depósitos en dólares de los bancos locales y el tradicional estancamiento de nuevas financiaciones del exterior en períodos eleccionarios, "afectaron nuestras líneas de crédito".

 
Advierten además que los productores aceleraron las ventas de sus stocks frente a expectativas de alzas de retenciones, desapareciendo el crédito comercial.
"Nuestra deuda no fugó del país, sino que está invertida en bienes productivos, que junto con el trabajo de nuestra familia, instalada en el norte de la provincia de Santa Fe desde 1929 y el de nuestra gente, nos permitirán, con mucho esfuerzo, salir adelante", asegura el comunicado de la compañía.

En el caso de las acusaciones sobre los créditos irregulares que habría recibido del Banco Nación cuando estuvo al mando de Javier González Fraga, se aclara que la entidad "es desde hace más de 50 años, la Institución financiera más importante para Vicentin y a lo largo de los distintos cambios de gobierno, siempre se ha manejado de manera Institucional".

"Lamentamos mucho que se ponga en tela de juicio la actuación de esta Institución que manejó una realidad compleja, a nuestro entender, de la mejor manera posible", agregan.

También hacen referencia a las negociaciones que vienen encarando para resolver el oscuro panorama que afecta a la compañía, sosteniendo que su directorio "está abocado las 24 horas, siete días a la semana, a explorar distintos caminos de salida de su situación, priorizando la puesta en funcionamiento nuevamente de sus activos, que permitirá mantener las fuentes de trabajo y refinanciar los pasivos de manera razonable".

Sin embargo, se advierten que la época del año y las incertidumbres propias de todo cambio de gobierno, ralentizan los procesos, aunque de todos modos añaden estar encaminados "a una solución que contemple las necesidades inmediatas de nuestros acreedores comerciales, la puesta en marcha de los activos y la renegociación de la deuda financiera, otorgando a las antidades, especialmente al BNA, todas las garantías que necesiten para consolidar el proceso".